¡Muchas gracias jefe!!
GRANDES ESPERANZAS
Desde que era joven tenía una gran
afición al teatro y gran parte de la “paga” que me daban mis padres, la
empleaba en ahorrar, para poder asistir, a alguna de las obras de teatro que se
representaban en la Semana Grande de las fiestas de Bilbao.
Allí, desde el “gallinero”, tuve la
oportunidad de presenciar obras maravillosas y a actores extraordinarios, a los
que admiraba. Ya en Madrid y con más medios económicos, continué disfrutando de
las historias que se representaban en los escenarios, pero nunca me consideré
válido para la interpretación y mucho menos para la dirección. De hecho, nunca
fui elegido para participar en el colegio en ningún festival de los muchos que se celebraban.
Los sueños de Nati, me han hecho
volver la vista atrás y he recordado aquel mes de diciembre del año 1989,
cuando de forma circunstancial, hice mis primeros “pinitos”, en este arte
maravilloso, que es el teatro, en el primer festival de Navidad de la Parroquia
de San Miguel de Chamartín.
No recuerdo la obra que
representamos, pero sí, que me “caló”, y que disfruté muchísimo viendo reír al
público y, me propuse seguir adelante, con la esperanza de seguir disfrutando y
haciendo disfrutar a los que vinieran a vernos
.
Hoy, día 31 de diciembre de 2018, miro hacia atrás y me siento orgulloso, y
feliz, porque aquella pequeña semilla que sembramos hace 29 años, ha dado un
fruto extraordinario, con más de 50 obras representadas, en las que he
intervenido, primero como actor y ahora como director de este maravilloso grupo
humano, que ha ido construyendo nuestro querido Teatrillo de Chamartín.
Por ello, aunque las fuerzas van decreciendo, la ilusión sigue
viva y, por eso, he titulado estas líneas, como “grandes esperanzas”, de que
podamos seguir
“Trabajando mucho, para que, nosotros y otros
muchos, disfruten de nuestro trabajo”
FELIZ AÑO
2019
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